8 de febrero de 2019

¡SILENCIO, SE RUEDA!

o se rueda en silencio.

¡Silencio, se rueda!

Grata sensación el rodar sin ruido. Acostumbrado a los crujidos y resonancia del carbono, me ha sorprendido el silencio de la madera.

Primeras pedaladas con la TBK, tras terminar de montarla con casi todas las piezas de mi Orbea Orca. Sólo hemos subido a Istán y luego «coronar» su primer puerto, aunque esta vez sea uno de mar.

Ganas de seguir conociéndonos, será mi compañera mientras sus creadores quieran. Me enamoré a primera vista y hoy lo volvió a conseguir. ¡Nuestro primer atardecer juntos!